Tras conocer la condena de prisión para el sujeto que disparó contra la oficial en enero del 2021, Daniel Calderón se refirió en Noticias Columbia al futuro de la funcionaria y sobre la pena impuesta al sentenciado de apellido Ruiz.
La oficial de la Fuerza Pública, Kimberly Suárez Narváez, tiene 25 años y actualmente está incapacitada. Ella ha tenido un extenso proceso de recuperación tras estar al borde de la muerte por las lesiones sufridas como consecuencia de una herida de bala en la cabeza.
Durante el juicio y en la argumentación de la sentencia, la Fiscalía y los jueces informaron que Suárez tiene serias secuelas físicas y emocionales. Los dictámenes médicos legales más recientes establecieron una incapacidad permanente del 75% de la capacidad general.
La oficial sufrió un trauma craneoencefálico con pérdida ósea y de tejido. Las lesiones le provocaron deterioro cognitivo y de la memoria.
Padece un trastorno por estrés, dolores de cabeza, convulsiones y depende del apoyo y ayuda de terceros para realizar tareas cotidianas. Recibe además terapia de lenguaje y emocional.
Durante la sentencia por el caso, el juez Norberto Garay, dijo que hay momentos en los que la oficial no reconoce a su hija y a otros seres queridos.
Antes de hablar sobre las opciones de Suárez en el ámbito laboral, el director de la Fuerza Pública, destacó su fortaleza y deseos de vivir.
“Ella es una guerrera, una luchadora. Desde el primer momento el diagnóstico de los médicos fue reservado porque las lesiones fueron muy serias. Tuvo que luchar por su vida durante muchos días y solamente su fuerza interna y la motivación, pienso yo, de ver a su hija, la sacaron adelante”, expresó Calderón.
La Fuerza Pública está a la espera de un informe médico final para determinar qué puede suceder con Suárez y si es posible asignarle algunas tareas en el Ministerio de Seguridad Pública, que por ejemplo, podrían ser en áreas administrativas.
El caso lo analiza una comisión médica de la institución que evalúa los dictámenes emitidos por entidades como la Caja Costarricense de Seguro Social y el INS.
Otra de las opciones es la pensión, que en casos como este se otorga de forma anticipada a funcionarios con lesiones severas que impiden su reincorporación a la vida laboral.
Calderón explicó que en el proceso también se toma en cuenta lo que Suárez desee hacer en apego a sus posibilidades.
Satisfacción
El hombre condenado por la agresión a Suárez recibió una condena de 30 años de prisión por la tentativa de homicidio. El Tribunal le impuso ocho años más por resistencia agravada y delitos de violencia doméstica en perjuicio de su expareja sentimental.
El juez Garay dijo en su explicación que se impuso una pena severa porque la víctima es una oficial de las fuerzas policiales que velan por la protección de los ciudadanos.
El código penal establece penas de entre 20 a 35 años de prisión a quien mate o intente matar a un miembro de los cuerpos policiales del Estado, municipal y de las demás fuerzas de policía públicas, cuya competencia esté prevista por ley, siempre que sea en ejercicio, por causa o en razón de sus funciones.
El director de la Fuerza Pública dijo que en la Policía reciben con satisfacción la sentencia y sobre todo que se haya tomado en cuenta el hecho de que se trataba de una funcionaria en servicio.
