Un 15 de enero de 1888 nació María Isabel Carvajal, escritora costarricense que sería conocida como Carmen Lyra y reconocida por sus escritos para niños entre los que destacan ´Los Cuentos de mi Tía Panchita´.
Pero su historia y legado van más allá, y así lo dejó ver la profesora de Ciencias del Lenguaje de la UNA, Isabell Ducca quien también fue coordinadora de la Cátedra de Carmen Lyra.
En conversación con Evelyn Fachler en el programa Por Tres Razones, habló de la mujer que además de autora fue política, activista e independiente.
Contrario a lo que se podría pensar por la época, no se le cerraron las puertas por el hecho de ser mujer, cursó sus estudios secundarios en el Colegio Superior de Señoritas, donde según comenta Ducca salió hablando inglés y francés y obtuvo su título de Maestra Normal.
También quiso convertirse monja, pero llegó hasta el noviciado.
En 1910 ya se le publicaban los primeros escritos y “se le alababan” como comenta la profesora Ducca; fue en 1918 cuando se ven por primera vez ´Los Cuentos de mi Tía Panchita´ en la Revista Lecturas por entregas, y la primera edición como libro la hace Joaquín García Monge, en Repertorio Americano en 1920.
Mujer de política y activista
Carmen Lyra fue parte del Grupo Germinal, del que también formaron parte José María Zeledón, Omar Dengo, Rubén Coto y Joaquín García Monge; era un “anarquismo criollo” que buscaba defender a los trabajadores, Carmen Lyra cuestionaba “la opresión de la castración humana por la religión”, según comenta Ducca.
Con esta agrupación se realiza la primera marcha del 1° de Mayo en favor de los Trabajadores, con una actividad que se realizó en La Sabana, cuyo primer discurso lo dio la misma Carmen Lyra.
Tuvo que morir fuera de Costa Rica
De acuerdo con la profesora Ducca, hay varias versiones sobre por qué Carmen Lyra se fue para México, pues al parecer ella fue la que solicitó irse, sin embargo se dice que fue una petición “para salvaguardarla”, a ella y a Manuel Mora, uno de los dirigentes del partido comunista de la época.
Ducca dice que ella fue expulsada, que se fue enferma y allá tuvo que buscar cómo obtener tratamiento; cuando se encontraba muy mal, quiso volver a Costa Rica y fallecer allí, sin embargo, no se le dio la oportunidad.
Murió en 1949, su cuerpo fue repatriado. La Misa del funeral se realizó en la Catedral Metropolitana donde acudió mucha gente y fue enterrada en el Cementerio Obrero en San José, donde según dice Ducca, la Junta de Gobierno dio la orden de abrir el féretro para comprobar que no venían armas. “Hasta el final no la dejaron en paz, eso cuentan”.
La profesora dice que es “la inteligencia más clara y productiva que dio el país, ninguno de los héroes nacionales ha dado lo que dio Carmen Lyra en literatura, educación y política”, comenta.
Carmen Lyra es quien actualmente aparece en los billetes de 20.000 colones.
En 1976 fue declarada Benemérita de la Cultura Nacional y en el 2016 Benemérita de la Patria.
