El zaguero tuvo un partido complicado este miércoles en Alajuela, falló en el primer gol manudo y no estuvo fino a la hora de marcar a sus rivales. Posterior al partido, el futbolista derramó lágrimas en el camerino. Llegó la hora de cambiar de equipo.
Aubrey David tuvo un partido complicado en el estadio Alejandro Morera Soto la noche de este miércoles. El jugador falló, no tuvo su mejor versión en la semifinal y después… en el camerino, rompió el llanto al saber que fue su último juego vestido de morado.
A falta de oficialidad (se realizará cuando Alajuelense termine la competición), el zaguero pasará a formar parte de las filas manudas. No llegar a un acuerdo con la ‘S’ y la propuesta de una gran oferta rojinegra, lo hicieron tomar la decisión. Empero, para él no fue fácil este cierre de época y más al quedar eliminado en estas semifinales.
No obstante, el entrenador saprissista Jeaustin Campos, lo acuerpó por completo y hasta contó parte de las intimidades que se vivieron después del compromiso donde Alajuelense los eliminó.
“Hay muchos oídos, páginas, vamos a educar la cultura futbolística, hoy (miércoles) estaba llorando Aubrey David en el camerino, le dolió muchísimo. Yo hablé con él hace un tiempo y le dije que ni si quiera le iba a preguntar si podía contar con él, porque sé que podía contar con él. En el primer Clásico cuando se definió su futuro, fue uno de los pilares altísimos, y siempre mantuvo un perfil profesional, ante todo muy honesto. Hay situaciones de partido, en donde fallamos, pero el fútbol es así, sin ninguna mala intención, hoy le di las gracias porque es un gran profesional, y siempre fue honesto, él es una gran persona, le aplaudo de pie a él”, dijo conmovido Jeaustin.
Aubrey también se sintió afectado pues en el primer gol de La Liga -obra de Carlos Mora-,no midió bien el pique y la velocidad del balón. Lo dejó pasar y luego pagaron muy cara su equivocación. Y, en el comentario general de la semifinal, no estuvo fino con su participación.
El jugador siempre ha sido muy agradecido con los tibaseños pues lo trajeron por primera vez al país en el año 2016 y siempre lo habían apoyado. No obstante, no llegaron a un acuerdo para una extensión de ligamen y por eso su decisión de cambiar.
Aubrey no tuvo su mejor día, rompió en llanto y se despidió. El próximo mes se pondrá otra camiseta, la de Alajuelense.
