Las mesas de trabajo sobre las jornadas 4×3 llegaron a su fin la noche de este jueves, sin un documento final al respecto.
Los encuentros se dieron entre el Ejecutivo, diputados, cámaras empresariales y sindicatos.
La ministra de la Presidencia, Natalia Díaz, dijo que todavía se deben presentar algunas modificaciones al proyecto que está en la Asamblea Legislativa.
La jerarca se mostró optimista, a pesar de que algunos sindicatos como ANEP, se apartaron de esta última sesión y piden el archivo del proyecto.
“Estamos en una excelente etapa para que el texto sea remitido en una versión ya final la próxima semana en la Asamblea Legislativa más tardar el día martes. Tengo entendido también que en la Asamblea Legislativa se está acordando una posposición del proyecto para que sea conocido eventualmente después del 4 de julio, pero ya tenemos un texto prácticamente finalizado que sabemos que los diputados pueden cambiar en su momento, por supuesto tienen todo su derecho a hacerlo, pero hay una base bastante sólida.”
Sobre estos cambios, la ministra de Trabajo, Marta Eugenia Esquivel, dijo que no son estructurales, aunque sí necesarios.
“Realmente sobre esos aspectos que son medulares, no se propone ningún cambio. Ya le digo, son básicamente aspectos muchos de forma aclaración de términos,” dijo por su parte la ministra de Trabajo.
Díaz agregó que el deseo del Ejecutivo es que el proyecto sea visto antes de que se acaben las sesiones extraordinarias a finales de julio.
Por su parte, la diputada oficialista, Pilar Cisneros, señaló que el texto se discutirá hasta el 4 de julio y que confía en que se pueda votar.
“Yo creo que el Frente Amplio no tendría ninguna razón para obstaculizar el proyecto, eh? Porque se han escuchado todas las observaciones y sugerencias que el Frente Amplio nos ha hecho por cierto algunas muy valiosas como ha reconocido inclusive la misma ministra de Trabajo.”
Los gremios sindicales consideran que el texto extiende desmedidamente las jornadas laborales, por lo cual se apartaron del diálogo con el gobierno. Agregan que no hay garantías para el cuido de los menores y que no queda claro el pago de horas extra. A esas observaciones se les une el Frente Amplio y otras agrupaciones en el Congreso que advierten revisarán el texto con lupa.
El sector industrial defiende que son jornadas excepcionales y que queda claro en qué condiciones se podrán aplicar y en cuáles no, como una alternativa para general empleo.
