La afectada contó a Noticias Columbia los momentos de terror que vivió cuando quedó atrapada en su vivienda por el impacto de una cabeza de agua.
Kimberly Bonilla Monge y su familia son parte de las personas damnificadas por la cabeza de agua que bajó la tarde del viernes 16 de setiembre y afectó varias comunidades del cantón, entre ellas la localidad de Salitrillos.
La encontramos este lunes por la mañana en el lugar conocido como Calle Chiflón, donde quedaba su vivienda. La fuerza del agua la destrozó por completa. Ahí repasó los instantes de miedo y angustia que vivió.
Bonilla, de 30 años, estaba en la casa con uno de sus hijos de ocho años de edad. Cuando se percató de que la situación se tornaba peligrosa sacó al menor y lo colocó en una parte más segura de una vivienda contigua.
Ella regresó brevemente a su propiedad para tratar de poner algunas de sus cosas en alto y en instantes comenzó a vivir una pesadilla.
“Cuando me di cuenta me había quedado atrapada en el lado de la puerta. No podía abrir por la misma fuerza del agua. La casa se me estaba cayendo encima, entonces tuve que despedazar las celosías para poder salir. En ese momento estaba la cabeza de agua y pensaba: ‘me tiro o no me tiro’. Al ver a mi hijo llorando me tiré”, comentó.
En la desesperación por remover las celosías se cortó las manos. Las marcas de sangre quedaron en la pared a un lado de la ventana.
Su otro hijo de 11 años y su esposo no se encontraban en la casa al momento de la emergencia.
“Se despedazó completamente la casa, todo, todo. No pude salvar nada. Me quedé descalza, con lo que tenía. Fue muy doloroso de perder las cosas de tantos años que hemos luchado por tenerlas. Fue muy duro”, añadió.
“Gracias a Dios estamos vivos, que es lo importante”, resaltó esta mujer que es una de muchas personas afectadas por los embates de las lluvias.
