La legisladora oficialista duda de la eficiencia de la Asamblea Legislativa y pide cambios, incluyendo el tiempo que se sesiona en el Plenario.
Aunque ella misma se califica como una novata, la diputada del Partido Progreso Social Democrático, Pilar Cisneros, asegura que el modelo de trabajo de la Asamblea Legislativo es obsoleto.
La legisladora acusó a la estructura del Parlamento costarricense de poner trabas para realizar un trabajo adecuado y señaló que es muy difícil cumplir con la misión encomendada por el pueblo debido a esta realidad.
“Me siento mal porque definitivamente así como estamos trabajando este Congreso no funciona y no va a funcionar. Somos uno de los Parlamentos más pequeños, con 57 diputados. España tiene 350 diputados y 17 comisiones, Italia tiene 650 diputados y 315 senadores, y tiene 14 comisiones”, señaló.
Cisneros apoyó declaraciones previas del diputado del Partido Liberal Progresista, Eli Feinzaing, quien calificó como “una maquila de proyectos” el trabajo de la Asamblea. La legisladora cuestionó está realidad y su aporte real para el país.
“Actualmente tenemos 400 proyectos de ley en comisiones y 300 en Plenario y somos 57 diputados. ¿Cómo vamos a hacer para analizar y estudiar esos proyectos? En el primer mes de trabajo se han presentado 81 proyectos nuevos. Definitivamente somos una máquina de producir proyectos de ley, algunos que no tienen absolutamente ningún impacto”, criticó.
En medio de los cuestionamientos, Cisneros puso en duda la necesidad de que se realicen sesiones en el Plenario Legislativo cuatro días a la semana, como se realizan actualmente.
“Yo me lo pregunto como un niño se pregunta por qué el sol es amarillo: ¿Por qué hay que sesionar en el Plenario de lunes a jueves, por qué? Estaría fascinada de proponer que el Plenario sesionara dos días por semana y que dos días completos sesionaran las comisiones. Así, las sesiones de comisiones serían de 3 o 4 horas para poder avanzar”, sugirió.
Los actuales diputados tienen entre sus prioridades establecer una reforma del Estado y aplicar cambios al primer poder de la República.
