Londres, 15 feb (EFE).- El primer ministro británico, Boris Johnson, dijo este martes que hay señales de una “apertura diplomática” en la crisis ucraniana, si bien admitió que la información procedente de los servicios de inteligencia no es alentadora.
En una declaración ante los medios en su residencia oficial de Downing Street, el jefe del Gobierno señaló que en este momento hay señales contradictorias procedentes de Rusia.
Johnson indicó que se construyen hospitales cerca de la frontera ucraniana y que hay más batallones desplegados, que “solo pueden ser construidos como preparativos de una invasión”.